En la madrugada de este jueves arribó a Venezuela un avión, desde la Federación de Rusia, con un cargamento de 50 mil dosis de vacunas Sputnik-V y un millón de tabletas del antiviral Favipiravir, como parte del puente aéreo humanitario y la alianza estratégica entre ambos países en la lucha contra la pandemia de COVID-19.
Durante el recibimiento en el Aeropuerto Internacional «Simón Bolívar», en La Guaira, el ministro del Poder Popular para la Salud, Carlos Alvarado, indicó que con este cuarto cargamento de vacunas se completará la segunda dosis de inmunización para el personal de salud y se continuará con la vacunación de los adultos mayores, que inició la semana pasada, y se incluirá también al personal de servicio expuesto al contacto con pacientes, como bomberos, Protección Civil, surtidores de oxígeno a los hospitales.
“En Venezuela hemos colocado más de 200 mil dosis de esta vacuna, con una muy buena aceptación por parte de la comunidad», afirmó, al precisar que el antídoto elaborado por el Centro Gamaleya de Rusia alcanza casi 92% de efectividad.
Ministros Arreaza y Alvarado reciben tercer lote de vacunas Sputnik-V
Asimismo, explicó que el antiviral ruso Favipiravir fue incluido por el comité terapéutico venezolano como parte del protocolo de tratamiento contra el COVID-19, luego de investigaciones realizadas en Rusia y China que demuestran buena efectividad para impedir la replicación del virus en el organismo.
Aseveró que este fármaco será distribuido de manera inmediata en todo el territorio nacional, a fin de atender a 25 mil pacientes, incluyendo con esta dotación a infectados con síntomas leves para evitar su progresión a moderados.
El ministro Alvarado destacó que el pese al bloqueo y las medidas coercitivas unilaterales contra el país, el Gobierno Bolivariano de Venezuela realiza todos los esfuerzos para diversificar las fuentes de vacunas y garantizar la protección del pueblo, manteniendo la meta de inmunizar este año a 70% de la población, con el propósito de cortar la cadena de transmisión y bajar la incidencia de contagios.
Acotó, en este sentido, que además de las vacunas rusa y china, se firmó con la hermana Cuba la realización del estudio fase tres de su vacuna Abdala y la posibilidad de producirla en el país, y se canceló más de la mitad de los recursos al mecanismo COVAX para el suministro de más de 11 millones de dosis.